"es un programa de televisión", esto no significa que se pueda decir y hacer cualquier cosa frente a cámaras. La vida cotidiana, sì, los insultos y la violencia quedan fuera, solo es de marginales por más supuesto talento que se tenga. Los tres finalistas, Manu, Bautista y Nico, son un buen ejemplo de conducta, con vaivenes, pero sin mayores exabruptos que incomoden o que estén dando ejemplo. Porque la televisión es "influencer" en sí misma. No hay que olvidarse. Suponemos que a Del Moro no le va a gustar que sus hijas, tiene tres nenas, hablen comol a participante que fue eliminada y que, según dicen, Telefé tratarà de "apaciguar" para darle futuros trabajos. De por sí, las presentaciones en diferentes lugares la pueden llenar de dólares. no de pesos. Le deseamos lo mejor a los finalistas de Gran Hermano. Y ya se abrió la convocatoria para Gran Hermano 2025- Telefè hace éxitos pero también nos llena de mediáticos muy poco formados para enfrentar una cámara, lo que no quiere decir que no sean cultos o preparados para otras funciones. La televisión es cosa seria. No es para cualquiera (En la foto, Bautista Mascia, mùsico uruguayo, finalista de GH2024)
