El César a la mejor película francesa recayó en Adieu Les Cons, que se alzó con siete premios en total, obra de Dupontel. La favorita, Las cosas que decimos, las cosas que hacemos, de Emmanuel Mourat, se quedó con uno a pesar de las 13 nominaciones, mientras que el mítico Francois Ozon con su "Verano del 85" se fue con las manos vacías. Una actriz desnunda en el escenario reclamando apertura de salas de cine y teatros e Isabelle Huppert en la conducción inicial con un fuerte reclamo, fueron solo algunas de las situaciones que se vivieron en la ceremonia. La economía del arte está quebrada en todo el planeta.