AADI, como el resto de las entidades autàrticas del paìs que reune a cantantes y compositores, le reclaman al gobierno por su intervención ANTIDEMOCRÀTICA en el derecho de propiedad intelectual. Las regalìas que cobra AADI, com ocurre con SADAIC o Argentores, proviene del uso del material fonográfico o audiovisual, en este caso, en fiestas, reuniones, bares. Es un porcentaje por el uso de la mùsica, no un impuesto a la mùsica. Los impuestos los cobra el gobierno, AADI cobra el porcentaje por el uso de la mùsica para mantener la entidad y las necesidades de la entidad. La desregulación impuesta por el presidente Javier Milei atenta contra la percepción de un dinero legítimo que se gana con la voz, con un instrumento, y su uso. He aquí el comunicado y todo nuestro apoyo.