Se ve que las mujeres conductoras no andan con pie derecho en la pantalla chica. Es ahora el caso
de Laurita Fernández, excelente actriz y bailarina, dedicada a la conducción a través de los nuevos productos de Laflia, la nueva empresa de Marcelo Tinelli. Su "Club de las divorciadas" logra 5 y excepcionalmente 6 puntos desde el lunes pasado en materia de rating. Este escaso número tiene estrecha relación con el contenido del programa, antiguo, fuera de época, donde las mujeres van a llorar porque o no pueden olvidar a su ex o éste no les pasa la cuota alimentaria, o no logran salir adelante solas. Con tantas conquistas sociales, no se entiende este retroceso que marca la misoginia reinante en la televisión. Ni las mejores leyes en materia de defensa de la mujer logra superar el machismo acendrado de la Tele, en manos de varones en su mayoría, con excepción de América. Este tipo de ciclos va bien en sociedades subdesarrolladas culturalmente y, al menos hasta ahora, creíamos estar lejos de esta consideración. Hay que esperar. Apuntamos que, por ahora, Laflia acapara horarios (pronto otro ciclo en canal 9 donde ya está) pero sin mayores resultados.