El debut de Mariano Iudica con "La noche del Domingo" , domingo a las 20 horas por América,
marcó el regreso del exitoso conductor a la pantalla chica de la mano de Gustavo Sofovich que reedita los grandes éxitos de su padre, don Gerardo. En líneas generales, Iudica es un avezado conductor pero peca de sensiblería y golpes bajos, especialmente cuando habla de y con su mujer, de sus hijos. Nada de esto es necesario para llegar al público. Tenemos ejemplos notables como los de Héctor Larrea y Berugo Carámbula al frente de ciclos de entretenimientos superexitosos que jamás apelaron a sus respectivas familias sino a la conducción simpática y pícara y solvente. Iudica no necesita más que pegar algunos gritos y ordenarse un poco más, claro está que fue el primer programa, menos risas en secreto con Nazareno, y tener en claro cuándo va a necesitar de la intervención del maestro Marzán quien no se merece gritos "Ahora no, ahora sí, corte maestro, después". Por dar ejemplos. A los músicos se los respeta, no son marionetas al servicio del humor de Iúdica sino integrantes de un elenco cuya cabeza es Iúdica. Y no hay que creérsela tanto, Iúdica. Sos bueno pero... hay ejemplos notables en l a historia de la televisión que te superan.